Manuel Montalvo Ruiz: tigre y dragón
Manuel Montalvo es, para mí, la prueba viviente de los prejuicios y los tópicos que aceptamos como verdades incuestionables en nuestro día a día. Cuando leí su historia contada por Javier G. Negre yo también sucumbí a los míos.
Montalvo creció en una familia humilde del madrileño y duro barrio de San Blas. Sus padres se separaron cuando tenía tres años y la dureza del entorno hizo el resto. Aunque le apasionaba leer, no se esforzó mucho en aprender las lecciones del colegio sino las de la calle. Era un tipo duro y muy inteligente; pronto se forjó un nombre. De pequeños robos pasó a trapicheos con drogas y de ahí, a tráfico de estupefacientes a gran escala. Le pillaron con 12 kilos en el maletero del coche y escapó de una condena seria por un tecnicismo legal. Aún así, estuvo un mes en una cárcel de Santander y la experiencia le cambió la vida.
Dio un giro radical y decidió ganársela de otra manera. Trabajó en la rama de la seguridad con Javier Manzanares (creador del grupo de seguridad de Los Manza) en una época en la que la vida nocturna de Madrid era una pesadilla por culpa de grupos como los Miami: extorsión a empresarios, luchas por el control de la droga en los garitos, ajustes de cuentas entre clanes de porteros y asesinatos. Había que tener unos huevos muy duros para ser portero; también cabeza.
Montalvo lo tenía todo, por eso en 2006 se ganaba a pulso la confianza de los Manza al mismo tiempo que estudiaba Derecho en la Universidad Antonio de Nebrija tras sacar un 9,7 en la prueba de acceso para mayores de 25 años, la calificación más alta de la Comunidad de Madrid; quería demostrar a su madre que podía estudiar. Por desgracia, la vida se la arrebató un año después de un cáncer y el dolor fue tatuaje en su espalda y herida dentro del pecho.
Ahogó el dolor con el trabajo de portero y acabó ganándose el respeto de Carlos Manzanares, que controlaba la seguridad de las salas más relevantes de Madrid y de Miguel Ángel Flores, organizador de la fiesta del Madrid Arena que acabó en tragedia. Montalvo estaba aquella noche de visita, su empresa no era la responsable de la seguridad del evento pero intervino cuando se desató la tragedia: fue uno de los que quitó el tapón que se había formado en la puerta.
Cosas y pelo
Tras el suceso, Montalvo comenzó a pasar temporadas en Miami y Tailandia. Fue en este país donde decidió escribir una novela que reflejara, en parte, sus vivencias sexuales. Los porteros de discoteca eran el fruto del pecado por aquel entonces y él había resultado una fruta especialmente apetecible. A su regreso, envió la novela a algunas editoriales pero la mayoría quería dulcificarla porque les parecía demasiado dura. Él se negó. Encontró una dispuesta a respetar el contenido íntegro y firmó el contrato: Cosas y Pelo arrasó.
« -He dicho que te bajes los pantalones,¿no me escuchas?.
La presión de su mano en mi cuello aumentó de tal manera que la respiración se dificultaba cada vez más, notaba cómo mi vista se nublaba un poco y una sensación de medio mareo se adueñaba de mí.
Con la mano que tenía libre los bajó hasta mis tobillos y por fin soltó la mano que me estrangulaba, la agresividad de su gesto no era normal. Al bajarme los pantalones, se dio cuenta de que no llevaba ropa interior, mi sexo estaba completamente enhiesto ante ella, pasó una mano por mi boca y me pidió que la chupara.
-¡Vamos, saca tu lengua!
Con sus dedos mojados agarró la punta y la empezó a masajear delicadamente.¿Por qué había tanta delicadeza en sus movimiento?. Su forma de tocarme era perfecta, sus dedos acariciaban mi glande con sumo cuidado. Ahora sus ojos habían cambiado de modo, el modo agresivo ya no existía, ahora había entrado en acción el modo sensual. La punta de su lengua perfilaba mis labios, notaba su excitación en el olor a sexo que desprendía, la mezcla de mil aromas penetraba hasta lo más profundo de mi ser, mi respiración estaba completamente agitada, el ritmo cardíaco se había incrementado tanto que podía percibir perfectamente mi corazón rebotando contra las paredes de mi pecho, su mano no dejaba de tocarme y un fluido viscoso brotaba de mi sexo, que ella aprovechaba para humedecer su mano y que el movimiento fuera lo más placentero posible.»
Cartas al cielo
Su segunda novela fue, sin embargo, una delicada declaración de amor de un niño a su madre que acaba de fallecer. Montalvo es el niño que te coge de la mano y te lleva con él a través de un proceso de duelo en el que su dolor es tu dolor y su desconsuelo tu desconsuelo hasta que, carta a carta, las tinieblas se disipan y se vislumbra la claridad de la luz.
También son delicados los últimos escritos de su web que muestran con sensibilidad poética el sabor agridulce del amor.
«Si, huía sin querer de un dolor que no entendía, de una mañana que era fría si no estabas a mi lado, de un laberinto del que no quería salir ni que nadie me enseñara a hacerlo si no ibas a estar fuera para ayudarme a vivir.»
¿Cómo es posible?.¿Pero Montalvo no era un tipo duro?. Esa es la clave: realmente lo es. Montalvo no va de duro, es duro. Montalvo no va de nada, simplemente va. No tiene que demostrar, simplemente muestra. No busca escandalizar, simplemente abre las entrañas y lo que hay dentro de ellas te excita hasta la locura o enternece hasta que se te saltan las lágrimas. En su cuerpo hay tatuajes que muestran su historia y debajo de la carne, en el centro del pecho, un yin y un yang. Un dragón y un tigre; luz y oscuridad; sensualidad y sexualidad; calidez y frialdad; dulzura y rudeza. Y como todo yin y yang, cada uno contiene parte del otro; por eso en la escritura de Manuel Montalvo hay tantos grises, tantas luces y tantas sombras.
Manuel Montalvo
Sexológicos
En tu web se te define como «Autodidacta, además de desarrollar múltiples quehaceres profesionales, alimenta una especial sensibilidad artística y creativa que le hace decantarse por la literatura como medio para evadirse de la dura realidad.»¿Lo consideras realmente un medio para evadirte de la realidad?
Manuel Montalvo
Es una manera de viajar por mundos totalmente desconocidos y por otra parte de desgranar otros que ya he podido descubrir. Me ayuda mucho a crecer como persona.
Sexológicos
¿Mundos desconocidos que, en cierto modo, habitan en ti?
Manuel Montalvo
En mí, y en cualquiera que se atreva a adentrarse en ellos.
Un escritor autodidacta, aficionado a la literatura desde pequeño. ¿En tu casa se leía?
Manuel Montalvo
Sí, tengo imágenes muy presentes de mi madre leyendo.
Sexológicos
Y tu padre reparaba máquinas de escribir…
Manuel Montalvo
Sí, vengo de una familia muy humilde, mi padre ha sido algo muy importante en mi vida, es un genio. Las máquinas de escribir quizá hayan tenido un doble fondo en mi vida.
Sexológicos
¿Te gustaba algún género en concreto?
Manuel Montalvo
Siempre me he decantado por libros sencillos y que te atrapen rápido entre sus páginas.
Sexológicos
¿Qué es para ti un libro sencillo?
Manuel Montalvo
Algo que solo con leer deje volar tu imaginación…
Sexológicos
¿Has leído literatura erótica?
Manuel Montalvo
Si, de unos años a esta parte me resulta muy curioso leer relatos y libros sobre sexo. Me gusta analizar la forma con la que se expresan los escritores sobre ese tema. Sobre todo las mujeres…
Sexológicos
¿Hay algún escritor de este género que te haya gustado en especial?
Manuel Montalvo
Sade ha marcado mucho mi trayectoria, pero alguien actual que me parece muy bueno es Megan Maxwell, realmente una escritora interesante.
Sexológicos
¿En qué momento decidiste que ibas a empezar a escribir?¿Por qué?
Manuel Montalvo
No fue un momento determinado, fueron un cúmulo de casualidades… Hasta que alguien me sentó en una silla y me hizo creer que valía para ello.
Sexológicos
Aunque he leído por ahí que 50 sombras de Grey tuvo mucho que ver
Manuel Montalvo
Esa fue la primera novela erótica de actualidad que leí, me impactó el fenómeno social que ha llegado a crear esa historia. Lo mío quizá no tenga mucho que ver, pienso que es algo más explícito y real a mi manera.
Sexológicos
¿Cómo es tu proceso creativo?
Manuel Montalvo
Me convierto en vagamundo jjjjjjjjjjjjjj me aíslo y escribo cuando me sale. Es divertido.
Sexológicos
¿Piensas alguna vez en el lector?
Siempre, al fin y al cabo ellos son los participes de mis locuras.
Sexológicos
¿Cuánto hay de ti en lo que escribes?
Manuel Montalvo
Yo creo que todos los que escribimos reflejamos una parte de nosotros en nuestras letras. No se si mucho o poco, pero siempre nuestras vidas están presentes y entrelazadas.
Sexológicos
¿Parte de la vida de «uno de los tipos más duros de Madrid» como te describieron una vez?
Manuel Montalvo
Yo no me considero así, quizá el puesto de trabajo que desempeñé durante tantos años fue la imagen que la gente se creó sobre mi. Pienso que soy un chico normal.
Sexológicos
¿Y «Ángel y demonio»?
Manuel Montalvo
La dualidad es un tema que siempre me ha interesado mucho, todo el mundo tenemos una doble personalidad que sale a relucir en distintos momentos de nuestra vida.
Sexológicos
También han dicho que eres «un amor»…
Manuel Montalvo
Jajajajajaja eso lo deberían contestar las personas que tengo cerca…
Lo cierto es que fue un comentario de una seguidora que leí en tu web.
Manuel Montalvo
Las mujeres que me siguen me sorprenden a diario, es increíble que sin conocernos prácticamente sean capaces de estar tan presentes en mis días
Sexológicos
Puede que sea porque tú estás presente en la de ellos como parte de sus vidas. ¿No dijiste en la presentación de Cartas al cielo que sientes a los que te siguen en el ámbito literario como una gran familia?.
Manuel Montalvo
Es que es así, esto que intento conseguir no son solo letras, es mucho más que eso. Hacer participes a todos los que me lean de sentimientos que quizá ya vivieron o en algún momento llegaran a experimentar. Somos una gran familia.
Sexológicos
¿Algún comentario de algún seguidor te ha tocado especialmente?
Manuel Montalvo
Muchos, la gente pone cosas realmente bonitas, incluso mucho más bonitas que las que yo escribo. Sin recursos literarios y directas como la vida misma. Es uno de los mayores premios que puedo y podré obtener.
Sexológicos
Tu libro Cartas al cielo fue prologado nada más ni nada menos que por Luis Eduardo Aute.
Que decir de alguien así. Cuando estuve a su lado en la feria del libro por primera vez me di cuenta de que hay personas en este mundo que están creadas para cambiarnos la vida.
Sexológicos
Algunos de tus escritos rezuman sensibilidad poética, ¿has leído poesía?
Manuel Montalvo
Si, he leído poesía. Me gusta la retórica y la forma que muchos poetas utilizan para describir vidas con un sentido mucho más amplio del que nosotros mismos podamos llegar a entender. La poesía es vida.
Sexológicos
Nos excitaste con Cosas y pelo y nos hiciste llorar con Cartas al cielo. ¿Sentiremos dolor con Dolor:Cosas y pelo 2?
Manuel Montalvo
Sentiréis agobio, rechazó, excitación, locura, pero sobre todo necesidad…
Sexológicos
Yo la siento ya
Brenda B. Lennox
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7 comentarios
[…] http://www.sexologicos.com/manuel-montalvo-ruiz/ […]
Ole por el Manuel. Que tio más guai
Me encanta esta entrevista y voy a leer sus libros, porque tengo la curiosidad de esas luces y sombras, el ying y el yang en la vida de Manuel Montalvo.
Que tio, menudo ejemplo de sensiblidad
Increíble persona e historia, caer para renacer como el Ave Fenix
Muchas gracias por la entrevista Manuel. Has sido muy amable.
Buenísima la entrevista, donde deja claro que aunque se tenga madera, la superación de uno mismo, para demostrar a una madre el amor infinito, es asombrosa.