Los hombres pueden sufrir torsión testicular, es decir, que el cordón espermático del que se sostiene el testículo se retuerza y corte el riego sanguíneo, lo que se traduce en un dolor de huevos que hace desear que venga Conan y te meta la espada por el culo. Por si no fuera bastante, hoy he descubierto que los hombres también pueden fracturarse el pene.
Imagina la escena, estás viendo una escena de tu peli porno favorita mientras te la machacas con ardor y de repente escuchas un leve chasquido, una explosión de dolor que te ciega como un fogonazo de luz, el pene se queda flácido como un gusanito muerto y comienza a inflamarse adquiriendo un poco saludable color amoratado.
Traumatismo peneano
La fractura del pene o traumatismo peneano es una lesión urológica que afecta a uno de cada 100.000 habitantes. La lesión provoca la ruptura de la túnica albugínea que envuelve los cuerpos cavernosos del pene.
El interior del pene está formado por tres espacios cilíndricos o senos de tejido esponjoso recubiertos de una capa membranosa. Los dos mayores son los cuerpos cavernosos, que se localizan a ambos lados y por encima del tercero, el cuerpo esponjoso, que abraza la uretra.
Estos espacios se llenan de sangre durante la excitación sexual para provocar la erección. Es precisamente en este estado cuando puede producirse la fractura, generalmente durante el acto sexual o durante la masturbación, entre el 30-50% de los casos aproximadamente.
Algunas posturas sexuales son más peligrosas que otras así como el vigor de la penetración. Un caso muy común se da cuando durante la penetración el pene sale y en vez de entrar en la vagina impacta contra el coxis de la mujer.
Tratamiento del traumatismo peneano
Históricamente, el tratamiento de un pene fracturado durante la actividad sexual era no quirúrgico (compresas frías, vendaje compresivo, entablillado del pene y medicamentos antiinflamatorios). En la actualidad, el tratamiento más elegido es una técnica quirúrgica consistente en , según explican en el portal urología-md «desenguantar el pene mediante un corte alrededor del eje cerca del glande del pene y removiendo la piel hasta la base para examinar la superficie interna. El cirujano luego evacua los hematomas para facilitar la observación de roturas en la túnica albugínea. Si hay alguna rotura, se repara antes de volver a suturar la piel en su posición normal. Se puede colocar una sonda Foley a través de la uretra peneana hasta la vejiga para drenar la orina y permitir que el pene sane.»
El paciente permanecerá en el hospital, con el pene vendado, un par de días y luego regresará a casa con o sin sonda y con medicación consistente en antibióticos y calmantes.
El grado de recuperación dependerá de la lesión que haya sufrido en las arterias, nervios y cuerpos cavernosos. La mayoría de los casos por actividad sexual sanan sin problemas aunque puede haber complicaciones como: infección; disfunción eréctil; priapismo; fístula; curvatura (encorvamiento) del pene; o pérdida importante de piel, de alguna porción de la uretra o de los cuerpos cavernosos.
Por último decir que también hay que tener cuidado con los juguetes sexuales como los anillos que se colocan en la base del pene ya que si cortan el riego sanguíneo pueden producir una herida conocida como lesión por estrangulación.
2 comentarios
Que dolorrrrrrrrrrr
Joderrr que putada que se parta la poya. Que dañoooo. jajajajaja